"El enfoque de Michniewicz para los partidos difíciles siempre ha sido el mismo: concentrarse en defender, no anotar si es posible y eliminar las fortalezas del oponente. Pero no tenía un plan sobre cómo trabajar en ataque, donde confiaba principalmente en la individualidad", dice. Jakub Dobiaš.
El mediocampo de Polonia carece de calidad para controlar el ritmo del juego. En los dos partidos disputados sólo mantuvieron el balón el 37,87% del tiempo. Solo Ghana, Costa Rica e Irán están peor. España domina la clasificación con un 70,85%, Argentina con un 67,53% y Portugal con un 65,55%. También tienen el segundo promedio más bajo de pases por posesión de balón detrás de Irán.
Es por eso que Polonia está tratando de controlar su presión. Pero aquí también hay un problema: ninguno de sus delanteros tiene el impulso para presionar repetidamente durante el juego. En Qatar, aunque Michniewicz intenta presionar cada noveno pase del oponente, que es un número superior al promedio entre los participantes de la Copa del Mundo, la eficiencia es muy pobre. Si pierden el balón en el campo contrario, consiguen recuperarlo en 10 segundos solo el 16,53 % de las veces. Esta es la séptima peor actuación.
Su plan ofensivo se basa principalmente en los cruces, desde donde marcó la mayor cantidad de goles (11) de todos los equipos europeos que avanzan en la clasificación para la Copa del Mundo. Pero hablando de eso, también debemos analizar su capacidad para obtener segundos balones. Y en ese sentido, los polacos son uno de los peores equipos del torneo. Tienen A) la peor tasa de acierto en el tercio defensivo, B) la cuarta peor en el mediocampo y C) la segunda peor en el tercio ofensivo.
Entonces, nuevamente llegamos a la cuestión de la calidad individual, pero eso recae principalmente sobre los hombros de Robert Lewandowski y Piotr Zielinski, con quizás Arkadiusz Milik como sustituto. Pero esto no es suficiente en una para solventar las falencias de un equipo tan desorganizado.
No se puede decir que Lewandowski no esté haciendo todo lo posible por el progreso de Polonia. Contra Arabia Saudita, asistió un gol, marcó otro él mismo, enviando uno de sus cinco tiros a la red. Los saudíes hicieron una buena actuación, pero gracias a la actuación de Lewandowski, el xG del partido se detuvo en 2,69:1,25 (+0,76 de penalti) en la victoria por 2-0.
El delantero del Barcelona, aún a sus 34 años, es sin duda uno de los mejores nueves del mundo. Ningún otro jugador, incluido Karim Benzema, crea oportunidades de tiro de mejor calidad en LaLiga o tiene un promedio de xG por tiro más alto, y solo Borja Iglesias del Real Betis convierte un porcentaje más alto de sus intentos hasta el momento. Aun así, hay límites en cuanto a lo lejos que puede llegar un equipo en un torneo si depende tanto de las actuaciones individuales de un solo jugador.