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Las tres finales olímpicas de España en baloncesto masculino

David Olivares
Pau Gasol lanza a canasta ante Estados Unidos en la final de Londres 2012
Pau Gasol lanza a canasta ante Estados Unidos en la final de Londres 2012AFP
La selección nacional es una de las más laureadas del mundo en baloncesto masculino. España ha conquistado dos Mundiales (Japón 2006 y China 2019) y cuatro Eurobasket (Polonia 2009, Lituania 2011, Francia 2015 y Alemania 2022). Además, atesora seis platas europeas (Suiza 1935, España 1973, Francia 1983, Francia 1999, Suecia 2003 y España 2007) y cuatro bronces (Italia 1991, Turquía 2001, Eslovenia 2013 y Turquía 2017).

Lo único que nos falta es un oro olímpico. Sin embargo, España acumula tres platas y un bronce en los Juegos hasta la fecha.

La primera medalla llegó en Los Ángeles 1984, cuando la generación de Fernando Martín, Epi, Corbalán, Iturriaga y Romay alcanzó una histórica final, en la que nada pudo hacer ante Estados Unidos.

En el equipo norteamericano estaban Michael Jordan, Patrick Ewing, Chris Mullin, Alvin Robertson o Sam Perkins entre otros. Muchos españoles trasnocharon para ver aquel partido que acabó con 96-65.

Para el recuerdo queda la histórica victoria ante Yugoslavia en semifinales que Los Nikis inmortalizaron en El Imperio Contraataca (61-74). Antes, nos habíamos deshecho de Australia.

Pekín 2008

España tiene el honor de ser una de las selecciones que más cerca ha estado de acabar con el dominio estadounidense. En Pekín 2008, perdimos por 11 puntos (107-118) en una gran actuación de Rudy Fernández (22 puntos), con el mítico mate ante Dwight Howard y de Pau Gasol (21 unidades). Para el recuerdo también está la capacidad reboteadora mostrada por Felipe Reyes. Pero el gran juego de Dwyane Wade, Kobe Bryant y Chris Bosh nos dejó con la medalla de plata.

España dejó en el camino a Croacia en cuartos de final y a Lituania en semifinales en un equipo liderado por Pau Gasol, en el que también brillaron Carlos Jiménez, Ricky Rubio o José Manuel Calderón.

Rudy Fernández ante Dwight Howard en la final de Pekín 2008
Rudy Fernández ante Dwight Howard en la final de Pekín 2008AFP

Londres 2012

Cuatro años más tarde, en Londres 2012, la final fue uno de los mejores partidos de la historia del baloncesto olímpico. En un gran partido de Pau Gasol (24 puntos) y Juan Carlos Navarro (21) perdimos tan sólo por siete puntos de diferencia (107-100). Enfrente había una auténtica constelación de estrellas con Kevin Durant, que anotó 30 puntos, LeBron James, de nuevo Kobe Bryant o Chris Paul. En aquella final Serge Ibaka capturó nueve rebotes y Marc Gasol anotó 17 puntos.

España había eliminado en cuartos de final a Francia, con el famoso puñetazo de Batum a Navarro y en semifinales a Rusia, después de un primer tiempo horrible en el apartado anotador solventado gracias a una gran reacción en la segunda mitad liderada por Pau Gasol.

Esta gran generación aún consiguió una medalla más: el bronce en Río tras derrotar a Australia en un tercer y cuarto puesto agónico, después de que Estados Unidos nos echara en semifinales. Fue la España de un soberbio Pau Gasol, de Mirotic, del Chacho y de Navarro.