El incidente ocurrió el pasado mes de junio en Los Ángeles, tras lo cual Bridges fue detenido y acusado de múltiples delitos.

Bridges se declaró inocente de un delito grave de violencia doméstica y el resto de cargos contra él fueron desestimados.

Tras su arresto y declaración de culpabilidad, Bridges no firmó un contrato de la NBA para la temporada 2022-23 en curso, perdiéndose los 82 partidos.

En reconocimiento de ese resultado, la NBA ha considerado que 20 partidos de la suspensión ya se han cumplido y si Bridges firma otro contrato, se le pedirá que se pierda los primeros 10 partidos para los que sea elegible y capaz de jugar.

La NBA ha llevado a cabo su propia investigación, entrevistando a Bridges, a la madre de sus hijos y a numerosos testigos, y también ha consultado a expertos en violencia doméstica.

La liga también dijo que la duración de la suspensión tenía en cuenta todos los hechos y circunstancias, incluido el resultado del asunto penal.

Bridges fue seleccionado por Los Angeles Clippers con el número 12 del Draft de la NBA de 2018, pero fue traspasado ese mismo día a los Hornets, donde firmó un contrato de cuatro años. Promedió 13,4 puntos por partido, 5,6 rebotes y 2,3 asistencias en cuatro temporadas.