Por primera vez, una francesa pudo coronarse campeona del mundo de triatlón. Cassandre Beaugrand, oro olímpico, aspiraba a un fantástico doblete, y llegó a la prueba en cabeza de la clasificación general de las WTCS. El segundo puesto le bastaba para alcanzar el objetivo, sin tener que esperar a los demás resultados.
En la natación, Beaugrand rozó el desastre al tomar una dirección completamente distinta a la del resto y perdió un tiempo precioso. Por ello, se vio obligada a hacer un gran esfuerzo para limitar los daños, y lo consiguió, ya que salió a sólo 15 segundos de la cabeza de carrera. Emma Lombardi, que tuvo un mejor inicio, fue finalmente tercera.
Cassandre se unió pronto al grupo de cabeza en bicicleta, junto con su compatriota y su gran rival (Beth Potter). Las dos francesas marcaron el ritmo. Como resultado, sólo la británica podía cambiar el guion de car al título. Nadie atacó demasiado, y un grupo de 12 triatletas llegó junto a la transición para luchar por los honores en la carrera a pie.
Y ésta era precisamente la especialidad de la gran aspirante, que no tardó en acelerar y descolgarse. Lombardi, segunda, se hizo con la tercera plaza, una posición que, como el año anterior, le garantizaba el bronce en la clasificación absoluta. La mejor española fue Miriam Casillas, quien firmó un quinto puesto para el recuerdo.
C. Beaugrand, Imperial durante toda la temporada, ganó las series de Cagliari y Hamburgo. Pero lo más destacado fue, por supuesto, su triunfo en París. Desde este sábado 19 de octubre es, sin duda, la reina indiscutible de la disciplina.