Titular en los dos primeros partidos de la Roja en el Mundial contra Costa Rica (7-0) y Alemania (1-1), Dani Olmo, ha hecho una entrada a lo grande en su primer Mundial.
El miércoles pasado, en el 11º minuto, realizó una gran combinación con Gavi para acabar marcando a la media vuelta frente al Costa Rica el gol número 100 de la Roja en mundiales.
Huir de España para seducirla
Dani Olmo inscribió así con letras de oro su nombre en la historia del fútbol español, que empezó a descubrirlo con su llegada a la Roja de la mano de Robert Moreno, el antiguo segundo de Luis Enrique, que tomó las riendas de selección española durante el tiempo que se apartó 'Lucho' por la enfermedad de su hija Xana, fallecida de cáncer.
Nacido en Terrassa (la misma ciudad que el entrenador del Barcelona Xavi), Dani Olmo empezó en el fútbol en club local, donde su padre era entrenador, en la tercera división española. Rápidamente, a los 9 años recaló en el Espanyol, antes de pasar a La Masía, el centro de formación del Barcelona, al año siguiente.
Pero, en julio de 2014, con 16 años, el Barça le hace saber que no entra en sus planes y decide intentar la aventura en el extranjero. Aterriza en el Dinamo de Zagreb, donde va subiendo escalones hasta el primer equipo y el título de jugador del año en Croacia en 2018.
Tras cinco años en Croacia, Europa pone sus ojos en él y el Barça aprieta los dientes. Decide viajar a Alemania fichando por el RB Leipzig en enero de 2020 por unos 30 millones de euros (31,1 millones de dólares).
Simultáneamente, la selección Sub-21 lo llama para integrar un grupo donde también están Ferran Torres, Pedri o Eric García, que también fueron subiendo niveles hasta la absoluta y el Mundial-2022.
"En la selección, juego cada partido como si fuera la primera vez", dijo Olmo antes del inicio del Mundial, que estuvo a punto de perderse.
'Preocupación'
El 3 de septiembre pasado, Olmo tuvo que abandonar el terreno de juego en el minuto 11 del partido contra el Eintracht de Fráncfort (derrota 4-0). Las pruebas mostraron que sufría una rotura parcial del ligamento interno de la rodilla izquierda.
"No sabía el alcance de la lesión, lo vives con preocupación", dijo la pasada semana este centrocampista ofensivo en el Leipzig, más extremo izquierdo con la Roja.
Estuvo de baja un mes y medio y vuelve a los terrenos de juego tres semanas antes de la fecha del anuncio de Luis Enrique para Catar, con, especialmente, un gran disparo el 5 de noviembre en el campo del Hoffenheim (69) para sellar el 3-1 y recordar al seleccionador que ha vuelto en forma.
"Cuando el míster dio la lista sí que lo viví con cierto nerviosismo porque me dijo el penúltimo antes de Ansu. Sí que al final me puse nervioso, pero después muy contento", dijo Olmo en una entrevista con el diario catalán Mundo Deportivo el 21 de noviembre.
Todavía con contrato hasta junio de 2024, Olmo suscita ya el interés de varios clubes de LaLiga. El Atlético de Madrid intentó ficharlo en verano, sin éxito, y el Barça, su antiguo club, podría volver a la carga próximamente.
Pero mientras, este delantero con un buen pie derecho tiene otro objetivo: sellar la clasificación de la Roja a octavos de final del Mundial.