Márquez regresa a su amado GP de Alemania con el reto de batir a las Ducati
Ningún otro piloto ha ganado tantas veces en Sachsenring: con ocho victorias en ocho participaciones, Marc Márquez está invicto. Solo su operación en el brazo derecho le impidió competir el año pasado y defender su imbatibilidad.
El domingo, en la séptima carrera de la temporada, la victoria de Márquez supondría el final de una racha de 600 días sin levantar los brazos, un triste récord para el español, que ganó por última vez en octubre de 2021, en el GP de Emilia-Romaña.
Desde el contratiempo que sufrió al comienzo de la temporada 2020, Márquez no ha recuperado su mejor nivel, entre problemas físicos y nuevas caídas.
En Alemania el catalán conoce la receta: "La competencia está ahí, vamos a tener que aplicarnos desde el comienzo del fin de semana para preparar sábado y domingo, y continuar trabajando con Honda para mejorar".
El constructor japonés competirá sin la mitad de sus efectivos este fin de semana porque los españoles Joan Mir, compañero de Márquez, y Álex Rins, piloto del equipo satélite Honda-LCR, están lesionados y son baja.
Quartararo parte como tapado
Al contrario que Honda, las ocho Ducati en el campeonato estarán en la salida, lideradas por el primer clasificado de la general y vigente campeón, Pecco Bagnaia, ganador el pasado fin de semana en Italia.
En Mugello, Bagnaia aventajó a otras dos Ducati, la del español Jorge Martín y la del francés Johann Zarco. Márquez se cayó cuando era cuarto.
Gracias sus tres 'dobletes' consecutivos; ganar las carreras y los esprints disputados los sábados, Pecco llega a Alemania con una diferencia de 21 puntos en el campeonato sobre su compatriota Marco Bezzecchi (Ducati-VR46) y 24 sobre Martín, tercero.
En Sachsenring, uno de los pocos circuitos en el que los pilotos ruedan en el sentido contrario a las agujas del reloj, el francés Fabio Quartararo intentará repetir su actuación del año pasado, cuando se impuso por delante de Zarco.
Quartararo, campeón del mundo en 2021, tiene problemas con su Yamaha desde el comienzo de la temporada. Es octavo a 77 puntos del líder.
Pero el 'Diablo' sabe que Bagnaia estaba en la misma situación el año pasado: Quartararo era líder y el italiano estaba a casi 100 puntos tras la prueba alemana, antes de iniciar una increíble remontada hasta alcanzar el título de campeón mundial.