Tic-Tac. Jude Bellingham (19) está cada vez más cerca. El centrocampista inglés es la prioridad del Real Madrid. La historia es pública desde el pasado verano. En invierno, la relación entre la casa blanca y el entorno del jugador se ha afianzado.
Bellingham es el objeto de deseo de media Europa. El Liverpool y el Real Madrid son los clubes que más interés han mostrado por él. Los reds, sin embargo, parecen quedarse atrás en la mitad de la carrera. Desde Anfield ven como el equipo español ultima detalles para cerrar el traspaso del deportista en junio.
El centrocampista inglés se ha decantado por el Bernabéu. Pese a la loable llegada, aún existen puntos escenciales que deben definir el Real Madrid y el Dortmund para que se concrete la operación. La primera de ellas es el valor del traspaso.
El Real Madrid ha puesto un tope: 110 millones + objetivos. El Dortmund, un conjunto acostumbrado a recibir sumas extraordinarias por jóvenes (véase el caso de Jadon Sancho o el de Haaland) entiende la postura del cuadro merengue.
Salvo Aurelién Tchouaméni (22), el Real Madrid no ha fichado a un jugador por más de 60 millones de euros. La política de austeridad blanca fue impulsada después de la pandemia. En dos años, la entidad contrató a tres deportistas (Tchouaméni, Camavinga y Alaba). En el último mercado, Rudiger fue el único refuerzo. Así las cosas, es complicado que la directiva modifique la variable económica que ha implementado con éxito.
Además del valor del mercado, el Madrid fijó un segundo punto: el salario. Son pocos los deportistas que han devengado un sueldo superior a los 12 millones de euros anuales en Chamartín. Bellingham, al parecer, presenta ese tope. Una cifra generosa que solamente sería sobrepasada en caso de que Mbappé llegase algún día al Bernabéu.
Bellingham, por ahora, está cerca de un histórico contrato galáctico para un jugador que, con 19 años, se posiciona como la gran promesa del fútbol inglés.