Imanol Alguacil valoró de esta manera el enfrentamiento ante el Benfica: "Hemos visto que han cambiado de sistema en los dos últimos partidos y mañana veremos por qué se deciden. Tienen grandes jugadores, un gran entrenador y el partido va a ser muy diferente al que jugamos en Da Luz. El Benfica es un equipo campeón, que no hace mucho ha hecho muchas Champions y hay que tenerle mucho respeto por su historia, los jugadores que tienene y cómo juegan. Nos va a costar una barbaridad repetir el partido que hicimos allí".
Para el de Orio la clave va a ser que la Real juegue a su estilo, es decir, que los jugadores sean ellos mismos.
Sobre sus jugadores, considera que en ocasiones juegan de maravilla aunque no siempre se pueda como ocurrió en el último partido liguero y recordó con cariño su etapa con jugadores portuguese como Océano y Carlos Xavier.
Último partido de Liga
Con respecto al del último partido liguero, en el que el Barça se llevó la victoria in extremis con un gol de Araújo apuntó: "Los jugadores estaban igual de cabreados que yo. Los sentimientos no los puedo esconder. Todos estábamos enfadadísimos porque no pudimos ganar al Barcelona".
Además añadió: "El equipo estaba muy fresco y cometimos errores que no fueron por el cansancio ya que no habíamos jugado entre semana y hay jugadores que están acostumbrados a jugar estos partidos".
"Hemos jugado tres partidos con buen inicio en el que nos faltaron dos puntos, y ahora nos enfrentamos a un equipo campeón, que va a venir con ganas de revancha. Vamos a ver un Benfica completamente diferente juegue como juegue.
Barrenetxea calificó el encuentro como final, algo con lo que no está de acuerdo. "Las finales se juegan en mayo, ojalá la afición cree esa ola de 25 metros y tenemos que hacer explotar el Real entre la afición y el equipo, pero todavía no es una final".
Además, remató. "Mañana es un día para hacer historia si ganamos".
Por último, pidió confianza en Sadiq como la tuvo en Oyarzábal tras su lesión y aseguró estar "muy contento" con su trabajo.