En el plano individual, Oblak (31) ha ganado en cinco ocasiones el Trofeo Zamora, récord absoluto compartido con Antoni Ramallets y Víctor Valdés. Asimismo, ha disputado 454 partidos con la camiseta del Atlético de Madrid y está a dos de entrar en el top cinco histórico del club. Sólo le superan Koke, Adelardo, Tomás Reñones, Enrique Collar y Carlos Aguilera.
El esloveno llegó al Atlético de Madrid en la temporada 2014-2015 para cubrir la marcha de Thibaut Courtois, que después de una cesión que acabó siendo de tres años, volvió al Chelsea, tras ganar la liga y ser subcampeón de Europa.
El Atleti pagó al Benfica 16 millones de euros, por un jugador que acabaría siendo un emblema en el club. La leyenda la empezó a engrandecer en las semifinales de la Champions de 2016 cuando detuvo un penalti a Müller en las semifinales ante el Bayern.
Por desgracia para los intereses colchoneros, el Atleti perdería posteriormente la final de Milán ante el vecino, el Real Madrid desde los 11 metros. Memorables también son sus actuaciones frente al Arsenal en semifinales de la Europa League de 2018 o ante el Liverpool en octavos de Champions de 2020.
Su paso por Lisboa
De este modo, esta noche Jan Oblak regresa al Benfica, el equipo que le abrió las puertas del fútbol europeo al más alto nivel.
Fichado del Olimpia Ljubljana en 2010, Oblak afrontó cuatro cesiones (al Beira-Mar, al Olhanense, al União de Leiria y al Rio Ave) antes de tener minutos en Da Luz en la temporada 2013/2014.
Sólo un año como titular en el Benfica le valió el traspaso al Atlético de Madrid, donde ha hecho historia. El de Skofja Loka tuvo un recorrido similar al de Ederson, que también fue cedido, en este caso al Ribeirão y al Rio Ave, antes de establecerse en Da Luz y ser vendido al Manchester City.
Al haber estado tan sólo un año, Oblak no dejó un gran vacío en el club. Pero seguramente se habrá ganado el respeto y la admiración de los aficionados encarnados. Y es que en la temporada 13-14, el Benfica consiguió el triplete nacional (Liga, Copa y Copa de la Liga).
La final de la Europa League
Además, con Oblak bajo palos el conjunto lisboeta alcanzó la final de la Europa League, disputada en Turín, en la que sólo el rey de la competición, el Sevilla, y desde el punto de penalti, le apartó de la gloria. Era el tercer título para los hispalenses.
En semifinales, el Benfica apartó a la Juventus de su final, con una gran actuación del meta esloveno en el partido de vuelta, que acabó sin goles en el Juventus Stadium. Antes, habían dejado en el camino a AZ Alkmaar y Tottenham Hotspur.