Cinco razones que explican el fracaso del Flamengo de Sampaoli en la Libertadores
A continuación cinco razones del golpazo sufrido por el campeón defensor del principal torneo de clubes de América a manos del paraguayo Olimpia, que lo venció 3-1 el jueves en Asunción (3-2 en el global).
Once sin consolidar
Desde que se estrenó en el banquillo del equipo más popular de Brasil, el 19 de abril, Jorge Sampaoli ha dirigido treinta partidos (64% de victorias) y en ninguno repitió el once titular.
El técnico, de 63 años, explicó en el pasado su predilección por las rotaciones: tener jugadores frescos que mantengan la intensidad del equipo.
Pero en el Flamengo no ha conseguido consistencia y el equipo ha tenido rendimientos irregulares, lejos de lo que se espera de la segunda nómina más valorada de Sudamérica (evaluada en más de 160 millones de euros por Transfermarkt).
"Hay muchas preguntas que hacerse sobre el trabajo del entrenador argentino. Es excelente desde el punto de vista táctico, pero aún no ha conseguido mostrar esa faceta en treinta partidos", escribió el comentarista Paulo Vinicius Coelho en UOL Esporte.
Defensa frágil
Anotar goles no suele ser un problema para los elencos de Sampaoli: su 'Fla' ha marcado 54 entre el Brasileirao, la Copa do Brasil y la Libertadores.
Pero en su mandato, los rubro-negro han demostrado ser frágiles atrás, al encajar más de un tanto por partido (33), especialmente mediante juego aéreo.
Las tres dianas de Olimpia fueron de cabeza. Y, de las 59 recibidas en toda la temporada, 26 (44%) llegaron a través de la vía aérea, según Globo Esporte.
Líos internos
A lo largo de su carrera, Sampaoli ha sido cuestionado por jugadores y directivos por su forma de relacionarse con los demás.
En el 'Mengão' ha afrontado al menos dos líos internos: con el centrocampista Arturo Vidal y con el delantero Pedro.
Vidal lo llamó "un perdedor que no sabe apreciar a los jugadores" una vez fichó por el Athletico Paranaense en julio debido a su escaso protagonismo con el argentino.
El caso de Pedro fue más grave. El goleador del 'Fla' fue golpeado por el expreparador físico Pablo Fernández, mano derecha de Sampaoli, por negarse a calentar durante la victoria por 2-1 ante el Atlético Mineiro en el Brasileirao el 29 de julio.
El manejo de la situación afectó su relación con el vestuario, según la prensa local.
Bajo nivel
Pese al poderío de su nómina, cuyo valor en Sudamérica solamente es superado por Palmeiras, el Flamengo ha tenido flojos rendimientos individuales.
Contra el Olimpia, el portero Matheus Cunha y el experimentado lateral izquierdo Filipe Luís tuvieron responsabilidad en algunos goles.
La prensa y los aficionados protestan por la "pasividad" y el bajo nivel de varios futbolistas, véase Gerson, David Luiz, Everton Ribeiro o Everson 'Cebolinha'.
"Hay que ver la manera como se disputa cada jugada, los detalles de los goles, cómo se le ofrece espacio al adversario, cómo no se mata la jugada", criticó el comentarista Mauro Cezar Pereira en su canal de YouTube.
Herencia complicada
Sampaoli recogió un equipo que venía golpeado anímicamente, después de haberse ido con las manos vacías en las cuatro competiciones que disputó en los primeros meses del año.
Entonces dirigido por el portugués Vítor Pereira, el 'Mengão' perdió en enero la Supercopa de Brasil con Palmeiras (4-3), su gran rival de los últimos años.
Esperaba disputar la final del Mundial de Clubes con el Real Madrid, pero cayó en semis con el Al Hilal (3-2) en febrero.
Independiente del Valle lo venció vía penaltis en la Recopa Sudamericana y Fluminense ganó también en la final del Campeonato Carioca en abril (4-3 en el global).
"Empezamos el año con cuatro títulos perdidos. El equipo, a partir de ese momento, nunca tuvo la confianza y consistencia que tuvo el año pasado", dijo Filipe Luís tras la eliminación frente al Olimpia.
El 'Fla', sin embargo, tiene oportunidades para no irse en blanco en 2023: jugará ante Gremio, el miércoles, la vuelta de las semifinales de la copa local (venció 2-0 en Porto Alegre).
Y en el Brasileirao tiene opciones matemáticas de alcanzar el liderato, aunque parece complicado: a falta de 18 jornadas, es segundo, a trece puntos del Botafogo.