Introducción

Campeones en 1984 y 2000, Les Bleus figuran entre los mejores equipos europeos de la historia, pero en los últimos 24 años los resultados han sido dispares. En 2016, los de Didier Deschamps fueron sorprendidos en casa por la Portugal de Éder en la final, dejando una gran impresión. Eso no les impidió ganar el trofeo mundial en Rusia dos años después, pero Francia decepcionó, por desgracia, en la Eurocopa 2020.

Cuando se da un paso atrás, resulta que esta selección francesa se siente más a gusto en el Mundial y se ha creado recientemente un sentimiento de revancha. Sí, Les Bleus quieren hacerlo mejor este año en Alemania: en otras palabras, llegar hasta el final y ganar otro trofeo.

Para ello, tendrán que ser muy fuertes, tanto técnica como mentalmente. Porque hace tres años, la eliminación a manos de Suiza en los octavos de final puede explicarse, en parte, psicológicamente. Sin embargo, no hay que olvidar que es la esencia misma de la competición y que a veces se pierde, incluso cuando la impresión sigue siendo bastante positiva. Eso no significa que haya que aceptarlo. Por eso, Francia espera más de sus grandes jugadores a partir del primer partido contra Austria.

Deschamps estará allí para crear el mejor ambiente posible, y esa es otra de las razones por las que Les Bleus figuran entre los favoritos. Hay un estatus que respetar: el de vigentes subcampeones del mundo, que buscan el éxito en la Eurocopa.

Con un equipo muy unido, individualidades impresionantes y un plan de juego eficaz, es un hecho que los galos saben cómo ganar en los grandes torneos, y les toca demostrarlo en la escena europea. A excepción de Antoine Griezmann, Olivier Giroud, Kingsley Coman y N'Golo Kanté, los jugadores que estuvieron a punto de hacer historia hace ocho años ya no estarán presentes, y corresponde a una nueva generación demostrar su valía.

Primero, contra Austria, el lunes 17 de junio.

Fortalezas

¿Cuál es el principal punto fuerte de esta selección francesa? Sin duda, el seleccionador, que lleva casi doce años en el cargo y conoce todos los entresijos de una gran competición internacional.

Didier Deschamps volvió a llevar a sus hombres a la final en el último Mundial, demostrando que probablemente sabe dirigir un equipo mejor que nadie. Siempre criticado por su filosofía de juego restrictiva, suele encontrar la manera de hacer de la tricolor un equipo dominante. Sí, a veces Francia ha fallado, pero así es el fútbol. Este verano, en Alemania, los franceses esperan que Deschamps les muestre el camino...

Y hay otro al que se ve como el Mesías: Kylian Mbappé. Recién llegado al Real Madrid, Les Bleus se verán liberados del peso mediático de su capitán y podrán concentrarse en el terreno de juego. De hecho, el número 10 siempre ha sido un líder en las grandes competiciones... salvo en la Eurocopa. Como él mismo reconoció en rueda de prensa hace unos días, Mbappé estuvo desaparecido en la última edición y quiere redimirse siendo decisivo. Y eso es justo lo que esperan sus compañeros y todos los aficionados. Por encima de todo, somos conscientes de que es capaz de cosas extraordinarias.

Por último, Francia podrá contar con una medular muy sólida. Si seguimos una cierta lógica, los que formarán el centro del campo tienen mucha experiencia y están listos para rendir este verano. Con N'Golo Kanté, Adrien Rabiot y Antoine Griezmann, la selección francesa se beneficiará de un medio eficaz, polivalente y con talento. Sabemos que estos tres jugadores pueden brillar en los grandes momentos, y el regreso de Kanté trae nuevas esperanzas, mientras que toda Francia espera que Griezmann les deleite por enésima vez...

Debilidades

¿Qué jugadores deben formar la bisagra central? Por el momento, no hay verdaderas certezas, a pesar de que la selección francesa cuenta con algunas buenas referencias en esta posición. Con Dayot Upamecano, Ibrahima Konaté y William Saliba, Didier Deschamps dispone claramente de tres jugadores con los que se siente cómodo. Y eso teniendo en cuenta que Benjamin Pavard y Jules Koundé también están en la zaga. Sin embargo, este último se utiliza más por la banda derecha. Queda por ver cómo piensa las cosas el seleccionador, pero esta zona gris podría resultar complicada para Les Bleus, y si la asociación será óptima o no.

En cuanto a la delantera, no sabemos si Olivier Giroud será titular. Un tal Marcus Thuram ha dado mucho de qué hablar en los últimos meses, gracias sobre todo a su excelente temporada en el Inter. Fue un titular decente en los amistosos, aunque no logró tener un impacto decisivo. No hay que olvidar que Randal Kolo Muani y Kylian Mbappé también pueden jugar en esta posición. Hay varias ideas, pero tendremos que estar preparados desde el primer partido contra Austria para poder crear peligro en el área.

Por último, está la cuestión de Aurélien Tchouaméni. Lesionado a principios del mes pasado, se esperaba que el centrocampista del Real Madrid fuera titular, dado su estatus a ojos de Deschamps. Ahora la situación ha cambiado, y aparte de si estará o no, su probable ausencia en el arranque contra Austria podría seguir siendo un factor determinante. Como hemos visto esta temporada en su club, el exjugador del Girondins de Burdeos ha demostrado que se ha convertido en un centrocampista muy bueno, y su polivalencia habría venido muy bien a los galos. Fiable con y sin balón, Tchouaméni posee las características perfectas para aportar equilibrio, seguridad y audacia al equipo. Queda por ver cuál será el resultado en Alemania.

El once ideal

Maignan; Théo Hernandez - Saliba - Upamecano (Konaté) - Koundé; Kanté - Rabiot - Griezmann; Dembélé - Thuram (Giroud) - Mbappé.

Con esta alineación, la selección francesa debería comenzar la Eurocopa 2024 contra Austria el próximo lunes. Es un equipo con algunas sorpresas en todas las áreas. Empezando por el centro de la defensa, la gran incógnita a pocos días del inicio de la competición.

¿Quién formará junto a Saliba entre Upamecano, Konaté e incluso Pavard? El Gunner es la única garantía real con la que cuenta Deschamps por el momento. Los de Bayern y Liverpool, por su parte, lucharán por la segunda plaza tras una temporada de altibajos a nivel de clubes. El defensa del Inter también querría sacudir la jerarquía establecida en defensa, tras haber dejado claro que no quería seguir jugando de lateral derecho con Les Bleus.

En el centro del campo, N'Golo Kanté, la gran sorpresa de la lista de Francia, es probable que empiece la Eurocopa como titular después de haber jugado dos partidos de preparación en el once inicial. El del Al-Ittihad aprovechó la lesión de Aurélien Tchouaméni para tener minutos, pero el madridista espera llegar a tiempo para recuperar su puesto en el centro del campo.

Finalmente, la última pregunta se refiere al número 9: ¿A quién preferirá el seleccionador, a Olivier Giroud o a Marcus Thuram? Si nos guiamos por los partidos contra Luxemburgo y Canadá, el jugador del Inter, que ha realizado una temporada fantástica con su club, parte con ventaja. Pero ojo, la experiencia y el talento de Giroud lo convierten en una figura clave en este tipo de citas.

La clave

Evidentemente, como siempre ocurre con la Francia de Didier Deschamps, la clave de este equipo reside en la fuerza del colectivo y del grupo. Eso es lo que permitió a Les Bleus ganar el Mundial en 2018 y ser subcampeones en 2022.

A partir de este colectivo habrá que crear una solidez defensiva rígida e impermeable, otra gran fortaleza de este equipo cada vez que se presenta en la fase final de una gran competición. Didier Deschamps, alumno de la escuela juventina de los años 90 y de Marcelo Lippi, ha basado su táctica en encajar el menor número de goles posible. Con un grupo cohesionado y una defensa estable, las individualidades en ataque marcarán las diferencias necesarias para anotar y permitir a los Bleus ganar los partidos. Hay muchos ejemplos para ilustrar nuestro punto de vista: contra Bélgica en 2018 o el partido de cuartos de final contra Inglaterra en Catar.

Estas son la(s) clave(s) para la selección francesa, que está desesperada por evitar el fiasco de 2021, cuando fue eliminada por Suiza en los penaltis. Uno para todos y todos para uno, ese es el lema de este equipo bajo este seleccionador.

Predicción

Como uno de los favoritos para levantar el trofeo el 14 de julio, sólo podemos imaginar a este equipo alcanzando al menos las semifinales. Cualquier otro resultado sería una gran decepción para un equipo que tiene armas para poner nervioso a cualquiera de sus rivales.

Pero cuidado con los fantasmas de 2021, porque todo es posible en una eliminatoria. Pagaron el precio contra Suiza en la última Eurocopa, y habrá que tomar ejemplo de los dos últimos Mundiales.

En primer lugar, tendrán que superar un grupo bastante sencillo con Holanda,Austria y Polonia, antes de un posible Francia-Turquía o Francia-República Checa en octavos de final. En teoría, el camino hacia los cuartos de final parece accesible.