La detención de dos futbolistas del Legia en Alkmaar crea una crisis diplomática entre Polonia y Holanda

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Dos jugadores del Legia, detenidos en Alkmaar: crisis diplomática entre Polonia y Holanda

La policía rodea el autobús del Legia
La policía rodea el autobús del LegiaProfimedia
Al final del partido de la Conference League entre el Legia Varsovia y el AZ Alkmaar se produjeron disturbios fuera del estadio holandés que requirieron la intervención de la policía y la detención de dos jugadores.

Dos jugadores del Legia fueron detenidos por la policía holandesa al final del encuentro ante el AZ Alkmaar, produciéndose una crisis diplomática entre Varsovia y La Haya.

De hecho, el Primer Ministro polaco, Mateusz Morawiecki, pidió en Twitter a sus servicios diplomáticos que verificasen las circunstancias de los hechos que llevaron a la detención de los dos futbolistas. 

Esos dos jugadores fueron el portugués Josué y el serbio Radovan Pankov, quienes fueron conducidos a la comisaría tras el partido, que ganó el Legia por 0-1.

Según el club polaco, los dos jugadores se encontraban en dependencias policiales y no pudieron regresar a Polonia con el resto del grupo. "Los jugadores y aficionados polacos deben ser tratados conforme a la ley. No hay ningún acuerdo para violarla", añadió el Primer Ministro, que calificó la información del Alkmaar de "muy preocupante".

Reconstrucción de los hechos

Según los periodistas polacos presentes en el partido, la confusión surgió cuando la policía local y la seguridad decidieron tras el encuentro cerrar el estadio para evitar un enfrentamiento con un grupo organizado de aficionados del Legia.

A los representantes del club polaco, incluidos los jugadores, se les impidió entrar en los vestuarios y se produjeron altercados verbales y empujones.

Finalmente, la policía acordonó el vehículo en el que ya se encontraba la mayor parte del equipo, decidiendo entonces a los citados miembros de los de Varsovia

Según los medios de comunicación polacos, el propietario y presidente del Legia, Dariusz Mioduski, fue empujado por los policías, que le inmovilizaron en el suelo y rompieron el teléfono con el que estaba grabando los acontecimientos.

El viceministro polaco de Asuntos Exteriores, Pawel Jablonski, declaró el viernes en Twitter que sus servicios están analizando si"la policía holandesa y los empleados del club AZ Alkmaar infringieron la ley contra ciudadanos polacos (...) por su nacionalidad o su uso de la lengua polaca".

La Asociación Polaca de Fútbol (Pzpn) anunció que había pedido explicaciones a la federación holandesa y a la Uefa.