"Sois unos pesados. madre mía. Todos los días aquí. No podemos parar todos los días", dijo Joao Cancelo desde su vehículo cuando vio a unos chavales -presuntamente y según su versión, los mismos que están allí siempre- esperando tanto su llegada como la del resto de futbolistas. Sus palabras, captadas por una cámara, no tardaron en hacerse virales porque, sin ningún contexto, dejan en muy mal lugar al defensor del Barcelona.
A través de su perfil en redes sociales mediante un comentario, el jugador con pasado en Valencia quiso dar algunas explicaciones sobre lo sucedido y cuál es su opinión al respecto: "Por la estupidez que se escribe aquí en los comentarios tengo varias cosas que decir: primero, no son seguidores; son niños de 20 años que están todos los días, ya sea en la puerta del entrenamiento o cuando estoy con mi hija en un parque o cenando con mi novia".
Cancelo, que está teniendo un papel principal en el lateral derecho a las órdenes de Xavi Hernández (dos goles y dos asistencias) en este período de cesión procedente del Manchester City, continuó su argumento de la siguiente forma: "Segundo, piden autógrafos en cromos o suéteres (se entiende que se refiere a camisetas o sudaderas) para venderlos más tarde. Hay personas que no saben respetar el espacio del otro".
El luso, que jugará con su selección ante Eslovaquia (el próximo viernes 13 de octubre) y frente a Bosnia & Herzegovina (el lunes 16 del mismo mes) con motivo de la clasificación para la Eurocopa de 2024, trata de justificar una situación que le ha hecho quedar mal. "Para quienes critican, que traten de conocer la realidad del hecho para luego comentar. A los verdaderos seguidores siempre los respetaré. Mantente a salvo", concluyó.