Todo empezó cuando Éder Militao adelantó al Real Madrid en el minuto 65. El brasileño recibió un centro de su compatriota Vinicius y a bote pronto fusiló la meta defendida por Jan Oblak.
En la celebración del gol del Madrid cayeron objetos provenientes de un sector del Metropolitano. En el fondo donde estaba Courtois cayeron de manera continua varios mecheros y el belga se lo comunicó al colegiado. Por megafonía se pidió a la afición rojiblanca que no tirara objetos al césped.
Sin embargo, ese pequeño sector de la afición del Atleti hizo caso omiso a las indicaciones y continuó lanzando diferentes materiales al terreno de juego. En ese momento, Busquets Ferrer decidió suspender el partido y los jugadores se fueron a vestuarios. Koke se dirigió al fondo sur a pedir calma a los seguidores de su equipo y Simeone les pedía cabeza. También Giménez conversó con los aficionados.
10 más cinco minutos
Inicialmente, el parón fue de 10 minutos. Esto es lo que se dijo por megafonía. "Se comunica la suspensión del partido durante 10 minutos como consecuencia de los lanzamientos de varios objetos. Si no paran, será de forma definitiva".
El colegiado prolongó el parón cinco minutos más. Después, los jugadores salieron a calentar y el encuentro se reanudó sin que volviera a haber incidentes reseñables. Está por ver la sanción al Atlético de Madrid por estos incidentes.