El Girona no siente la presión del Barça y demuestra que no se le ha olvidado ganar (3-0)
El partido comenzó con la lluvia como protagonista, circunstancia que se ha festejado en Cataluña después de la sequía que azotaba la región.
En lo deportivo, el Girona recibía al Rayo en Montilivi después de padecer dos derrotas consecutivas por primera vez en la temporada. Todo sea dicho, ambas a domicilio y ante Real Madrid y Athletic.
Los de Míchel, que se medía a su equipo de toda la vida, empezaron el choque algo dubitativos. El Rayo creó peligro en una contra liderada por Miguel Crespo que buscó y encontró a Álvaro García, pero Gazzaniga estuvo atento para evitar el susto.
El Girona fue poco a poco sintiéndose más cómodo en el marcador. Empezó a pisar el área de Dimitrievski y pidió una mano de Espino tras un centro de Couto que no fue concedida. Los de Míchel tocaban y tocaban aunque les costaba generar peligro de gol.
Yangel Herrera probó fortuna con un cabezazo que apenas inquietó al macedonio. Posteriormente, Aridane evitó que la cosa fuera a mayores tras un centro de Couto que iba a rematar, de nuevo el venezolano.
Tsygankov omnipresente
Después de una primera mitad un tanto insulsa, el Girona salió con ánimos renovados en la segunda. Primero con una contra conducida por Couto y continuada por Portu, cuyo centro no remató bien Dovbyk.
Tsygankov probó a Dimitrievski en el 51 con un disparo ajustado al palo. Un minuto después, el ucraniano no fallaría. Balón de David López a la espalda de la zaga rayista, donde llega Miguel Gutiérrez. El madrileño avanza, y efectúa un pase atrás que Tsygankov ejecuta a la perfección para hacer el 1-0. Sexto gol del ucraniano-israelí esta temporada.
Vendaval gerundense
A partir del gol, el Girona jugó a placer y recordó al de siempre. De nuevo Tsygankov hizo una gran jugada que acabó en las botas de Dovbyk. El 9 de los de Míchel mandó incomprensiblemente la bola por encima del larguero.
Después fue el turno de Portu. Primero le anularon un gol por fuera de juego. Después, remató de tacón un centro de Aleix García que a punto estuvo de convertirse en el segundo gol del partido.
Expulsión de Chavarría
Pese a que el encuentro no estaba sentenciado, las sensaciones eran que el Girona podía hacer el segundo en cualquier momento. Y, por si fuera poco, Chavarría vio la segunda amarilla a 15 minutos del final, arruinando cualquier opción de los de Vallecas de sacar algo positivo de Montilivi. El motivo: un empujón a Miguel Gutiérrez. Había visto la primera un minuto antes por un pisotón a Couto.
El Girona siguió a lo suyo y obligó a Dimitrievski a hacer un auténtico paradón después de un buen remate de cabeza de Stuani, tras centro de Miguel Gutiérrez.
Savinho hace el segundo y el tercero
Después fue Aleix García el que enviaría un disparo por encima del larguero. Y el que no perdonó fue Savinho. El brasileño hizo una jugada personal que terminó en el fondo de las mallas rayistas. Lo había merecido el Girona durante toda la segunda mitad.
Después, Dimitrievski salvó a quemarropa un disparo de Stuani y Savinho, volvió a demostrar su capacidad de desborde para hacer un doblete en el descuento y poner el 3-0 definitivo en el marcador. Jugadorazo el brasileño.
Los de Míchel recuperan la segunda plaza y obligan al Barça a no dormirse. El Rayo, por su parte, necesita sumar urgentemente si no quiere verse en apuros en la recta final del campeonato.
Jugador Flashscore del partido: Viktor Tsygankov.
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