La selección Colombia Femenina volvió a sacarle una sonrisa a los 30.000 hinchas presentes en las gradas del estadio El Campín de Bogotá y a los otros millones que seguían el partido contra Camerún vía TV. Las sudamericanas se impusieron por la mínima diferencia contra un equipo africano que no cedió hasta que el seleccionador colombiano, Carlos Paniagua, envió al terreno de juego a Yésica Muñoz en el minuto 62' del encuentro. Cinco minutos más tarde marcó de cabeza a pase de Karla Torres el tanto que le brindó a las cafeteras su clasificación para los octavos de final del Mundial Femenino sub-20.
Camerún, un plantel que destaca por su potencia física y su capacidad para presionar al rival, le complicó el partido a Colombia. El encuentro, de hecho, fue algo confuso para las cafeteras. Los encuentros confusos, extraños, como dice el manual, se ganan con la cabeza buscando paciencia y promoviendo la estrategia por delante de las virtudes físicas del contrario. De esa manera, la tricolor ha logrado darle la vuelta a un partido que se inclinó a su favor en el tramo final. Colombia sufrió, pero ya está en los octavos de final de la competición.
“Le prometí a mi mamá que entraría a la cancha y haría lo mejor y eso fue lo que hice. Es fantástico marcar el gol del triunfo", dijo Yésica Muñoz a los micrófonos del GOL Caracol al cierre del partido.