Los fichajes que necesita el Liverpool este verano para volver a su mejor nivel

Todo ello contrasta notablemente con los esfuerzos de la temporada pasada, en la que el equipo de Jürgen Klopp ganó dos trofeos nacionales y estuvo a punto de completar un póker sin precedentes, cayendo ante el Manchester City en la Premier League y frente al Real Madrid en la final de la Liga de Campeones.

Pero la marcha de Sadio Mané, las importantes lesiones de Luis Díaz y Virgil van Dijk durante la mayor parte de la temporada y la escasa actividad en los dos últimos periodos de traspasos han provocado un desagradable tufillo a estancamiento en Anfield.

La irregularidad, el bajo rendimiento de las estrellas y la pérdida de identidad táctica han provocado resultados y actuaciones decepcionantes.

Aunque no siempre es la respuesta, parece como si una reconstrucción fuera ahora muy necesaria en el lado rojo de Merseyside, con la próxima ventana de traspasos de verano aparentemente clave para restaurar al Liverpool a su mejor nivel competitivo una vez más, especialmente cuando equipos como el Arsenal, el Manchester United e incluso el Newcastle se han levantado como fuerzas a tener en cuenta.

Por supuesto, el dinero disponible y las restricciones del fair play financiero entrarían de lleno en la ecuación, y no estamos sugiriendo que el club compre a todos los jugadores siguientes. Aquí, Flashscore se ha limitado a identificar algunas áreas claves y que deberían ser prioritarias para Klopp, nombrando algunos de los mejores candidatos para ocupar esos puestos y teniendo en cuenta los que realmente podrían estar interesados en formar parte del movimiento.

Reconstrucción del centro del campo

Jude Bellingham es el nombre que está en boca de todos, no sólo en Inglaterra, sino también en gran parte de Europa. La estrella del Borussia Dortmund se ha convertido en un jugador de élite en Alemania esta temporada, demostrando su capacidad al más alto nivel en la lucha por el título con su club, así como realizando algunas excelentes actuaciones con los la selección de Inglaterra en el Mundial

Es probable que encabece la lista de la compra del Liverpool, que necesita desesperadamente renovar las opciones del mediocampo, ya que jugadores como Thiago, Jordan Henderson y Fabinho no han rendido a su nivel habitual. Klopp también ha tenido que lidiar con jóvenes como Harvey Elliott y Fabio Carvalho.

Bellingham se convertiría de inmediato en un hombre importante en Anfield, y muchos ya han hecho comparaciones entre el estilo de juego de este joven de 19 años y el de la leyenda del Liverpool Steven Gerrard, quien ha suplicado públicamente su incorporación.

Sin embargo, su fichaje tendría un precio elevado, probablemente más de 150 millones de euros, y habría competencia con todos los demás clubes de élite de Europa, como el Manchester City, el Real Madrid, el PSG y el Bayern de Múnich.

James Maddison lleva sonando desde el último mercado de verano, y el futbolista del Leicester está deseando abandonar el King Power Stadium para mejorar sus perspectivas con la selección inglesa.

El centrocampista ofensivo ha sufrido varias lesiones esta temporada, pero aun así ha cosechado elogios, demostrando ser la chispa de un equipo en apuros.

El jugador está dispuesto a cambiar de club y el Liverpool necesita desesperadamente creatividad en el centro del campo. La habilidad de Maddison para encontrar pases en el último tercio podría revitalizar a un Mohamed Salah en dificultades y proporcionar un servicio muy necesario a Darwin Núñez en la delantera.

Declan Rice, sin duda uno de los jugadores más infravalorados de Europa en estos momentos, sería un fichaje fenomenal para el centro del campo del Liverpool.

Su capacidad para hacer un poco de todo de una manera tranquila y discreta haría maravillas, sobre todo por delante de la defensa, cuando Van Dijk está fuera de zona. Su capacidad para interceptar el juego y leer el peligro (y el juego en su conjunto), encajando a la perfección cada vez que los laterales deciden presionar, sería de un valor incalculable.

Emparejado con Maddison y Bellingham (si no con ambos), el jugador de 24 años sería un arma importante a las órdenes de Klopp.

Ayuda para Van Dijk

El Liverpool ha sufrido más esta temporada cuando Virgil van Dijk ha estado fuera del equipo, como la mayoría de los clubes cuando falta el que posiblemente es el mejor defensa del mundo.

Dicho esto, los Reds no tienen una plétora de opciones en el centro de la defensa, incluso sin su titán neerlandés. Joel Matip se desenvuelve relativamente bien, pero es propenso a cometer errores costosos, mientras que Ibrahima Konate aún no ha desarrollado todo su potencial y Joe Gómez lucha constantemente contra sus propios demonios de las lesiones.

A Klopp le vendrían bien un par de incorporaciones, no sólo para acompañar a Van Dijk, sino también para sustituirle en caso de que ocurra lo peor.

Joško Gvardiol hizo un Mundial fantástico con Croacia, llamando la atención en todo momento por sus batalladoras actuaciones con su máscara protectora a lo Batman. La estrella del RB Leipzig posee todos los atributos físicos necesarios para la Premier League: velocidad, potencia, físico... y parece que se deleita en la batalla, algo que el Liverpool parece haber perdido en los últimos 12 meses. Barcelona y Bayern de Múnich también se han interesado por él.

Fikayo Tomori podría ser otra opción. El exdefensa del Chelsea ha tenido una carrera estelar en la Serie A con el AC Milan, cosechando muchos elogios en Italia. Siempre descartado para la selección inglesa por el seleccionador Gareth Southgate -para disgusto de casi todos los seguidores de los Tres Leones-, ahora sería un momento excelente para que el veloz central de 25 años regresara a la Premier League y demostrara a todo el mundo de qué está hecho.

Por si fuera poco, Aymeric Laporte quiere marcharse del Manchester City este verano, después de perder su puesto en el once inicial en favor de Nathan Aké.

El internacional español estará desesperado por tener más minutos de juego con el fin de consolidar su puesto en la selección española para la Eurocopa de 2024, y todavía sería una mejora de las opciones actuales del Liverpool para los compañeros de Van Dijk. Se rumorea que el imponente central quiere marcharse al extranjero, pero el Liverpool podría convencerle para que se quedara en Inglaterra si llamara a la puerta. Sin embargo, parece poco probable que Pep Guardiola esté dispuesto a permitir el traspaso.

El despertar de Trent

Con razón o sin ella, Trent Alexander-Arnold es objeto de muchas críticas en el Liverpool. Considerado en su día como el mejor lateral derecho del fútbol mundial, el rendimiento del inglés ha caído en picado en los últimos 18 meses, lo que ha llevado a muchos a pensar que no está al nivel necesario para mantener la titularidad en Anfield.

Tal ha sido el declive de TAA que apenas entra en las convocatorias de Inglaterra, donde la competencia por ese puesto es feroz.

En ataque, el chico de 24 años todavía puede ser devastador, al igual que sus jugadas a balón parado, pero es en defensa donde radica el problema, ya que su colocación y su capacidad de marcaje están siendo objeto de un gran escrutinio, sobre todo durante la goleada por 4-1 que el Liverpool encajó frente al Manchester City.

Sin embargo, el lateral derecho no es un puesto fácil de cubrir. Denzel Dumfries podría ser una opción interesante, ya que el neerlandés tuvo una actuación impresionante en Catar y es un jugador regular en su club, el Inter de Milán. El estilo de juego de Denzel Dumfries, de 26 años, no difiere mucho del de TAA, ya que a Dumfries le gusta adelantarse todo lo posible para sumarse a los ataques, aportando pases de la muerte y centros; sin embargo, su capacidad técnica en defensa es notablemente más impresionante.

Giovanni Di Lorenzo, del Nápoles, probablemente atraerá pretendientes este verano, al igual que la mayoría de sus compañeros después de la temporada que están realizando.

Jugador polivalente, capaz de ocupar el centro del campo, la posición de central o incluso la de extremo, el internacional italiano es un lateral derecho al que también le gusta adelantarse y aportar goles y asistencias. Sin embargo, mantiene el agresivo ADN defensivo italiano que le convierte en un excelente jugador para la banda derecha.

Sin embargo, Di Lorenzo es el capitán del club y, además, muy apasionado, por lo que, aunque otras estrellas clave abandonen el Nápoles, él podría tener demasiados principios como para querer marcharse.

Una opción más barata podría ser Matty Cash, del Aston Villa. El internacional polaco pasa desapercibido en una liga plagada de excelentes laterales derechos, pero su ritmo de trabajo y su fiabilidad son de primer orden. Aunque no es un nombre tan glamuroso como los anteriores, sería un fichaje decente y económico que, si bien no mejoraría ni sustituiría a Alexander-Arnold, podría ser el empujón que necesita para recuperar su mejor nivel.

Comodín en ataque

Es probable que el Liverpool no busque grandes incorporaciones en ataque este verano tras haber desembolsado cerca de 150 millones de libras por Darwin Núñez y Cody Gakpo en las dos últimas ventanas, ambos menores de 24 años. Sería absurdo no darles más tiempo para que se adapten a Merseyside.

Dicho esto, un tal Harry Kane parece cada vez más dispuesto a ser traspasado por el Tottenham Hotspur esta temporada, y es probable que el presidente de los Spurs, Daniel Levy, acepte ofertas de unos 90 millones de eueros, aunque procedan de rivales de la Premier League.

Añadir la experiencia, los goles y la creación de juego de Kane a la plantilla del Liverpool les convertiría de nuevo en aspirantes inmediatos al título y les proporcionaría una profundidad ofensiva inigualable.

Incluso sin la clasificación para la Liga de Campeones, es probable que Kane esté interesado en el traspaso, dada su ansia por ganar cualquier tipo de trofeo, algo que sería más probable en el Liverpool.

También le permitiría seguir persiguiendo el récord goleador de Alan Shearer en la Premier League.

Obviamente, no va a suceder, y no hay ningún indicio de interés en Kane por parte de Klopp o del Liverpool. Pero qué buen equipo podrían hacer.