La Juve se miden al Lecce con preguntas, pero en el Allianz podrán tener ya respuestas
El Juventus quiere frenar la montaña rusa, pero no bajarse del vagón que podría llevarle a la Liga de Campeones, el objetivo de la temporada para un equipo que ha tenido que aplazar ambiciones mayores por vicisitudes judiciales.
A pesar de un mercado casi inexistente, salvo por la compra de Weah, los bianconeri han recuperado el entusiasmo y el gol de sus delanteros, o al menos lo tenían, porque en Reggio Emilia contra el Sassuolo el mecanismo volvió a atascarse, Vlahovic falló todo lo que se podía fallar, mientras Chiesa intentaba sostener el cuartel con un gol y mucho movimiento.
Errar es humano, perseverar es diabólico
Fue una lástima que fueran los de atrás quienes lo arruinaran todo con dos clamorosos errores en el primer y cuarto gol del Sassuolo. Tanto Szczesny como Gatti estarán en el partido contra el Lecce, como ha hecho saber Allegri. Al menos el portero, titular indiscutible. Otra cosa es el defensa, tan convincente hasta ahora que merecía una ampliación de contrato, pero que tendrá que demostrar que es lo suficientemente fuerte mentalmente después de la metedura de pata.
Por lo demás, quizá ni siquiera Allegri sepa lo que tiene entre manos y tratará de entenderlo mejor contra el Lecce. Como el técnico bianconero sigue repitiendo después de cada partido "este equipo sólo puede mejorar", es un poco como decir que ni siquiera él sabe cuál es el potencial y si será capaz de exprimirlo. Como líderes en el vestuario quedan el portero polaco y Danilo, además de Rabiot. El equipo carece de experiencia, pero tiene muchos jóvenes a los que intentar formar. Aparte de los ya 'veteranos' Miretti y Fagioli, está Iling, al que el técnico está labrando un nuevo rol como centrocampista para suplir la ausencia de Pogba, y está Yildiz, autor de un bonito gol con la Next Gen y por el que Allegri está apostando mucho.
Rotación en ataque
Sólo hablando de atacantes, como insinuó el técnico bianconero, es muy probable que contra el Lecce uno de la pareja principal empiece desde el banquillo para una rotación habitual, si será Chiesa o quizás Vlahovic sólo lo sabremos mañana. A Allegri le gustaría una rotación más masiva, pero dos consideraciones llevan a pensar lo contrario: la primera es que el entrenador no quiere pasos en falso contra un equipo que sigue invicto y que ahora ocupa el tercer lugar en la clasificación, la segunda es que la Juve no juega en las copas y por lo tanto debe tratar de aprovechar mejor la frescura de sus titulares, a diferencia de los demás que están casi obligados a elegir.
Ciertamente es demasiado pronto para hablar de partidos decisivos, y perder puntos en este momento podría no ser tan "letal" como a finales de campeonato, pero sin duda los bianconeri necesitan respuestas y mañana podrán tener algunas más. Los jugadores las buscan, el entrenador las busca y los aficionados las piden.