Ha sido la propia jugadora la que ha asumido la responsabilidad "por haber confiado en mi caddie y no haberme leído el papelito. Él ha asumido que se podía usar el láser como en todos los torneos y tampoco ha leído el papel", ha explicado en su perfil de Instagram.
Asímismo, ha indicado que "no hay culpables sino responsables", al tiempo que le ha echado un capote a su caddie. "No deja de ser un caddie increíble. Hemos hecho un trabajo impresionante. Si no llega a ser por lo del láser, que ha sido en dos hoyos, podíamos haber hecho el par (72) y estoy supercontenta".
Peláez considera que, a pesar de este malentendido que le ha costado la descalificación, están "haciendo un trabajo impresionante y que al final del día el amor que siento por Miguel (su caddie), que no lo está pasando bien, es lo más importante y prefiero afrontar cualquier situación desde ahí, que la vida sigue. Seguiré entrenando y jugando y creciendo".