New York Knicks: polémicas, rumores sin fondo, y una imagen que limpiar en la NBA 2022-2023
Hablar de los Knicks es hablar de exigencia, es hablar de potencial y, en el último tiempo, es hablar de rumores sin fondo, sin filtro y, en algunas ocasiones, sin sentido. Ese fue el caso de un grupo de periodistas de Nueva York que, en el mercado de verano, aseguraron, con vehemencia, la contratación de Donovan Mitchell (26)..
El escolta era, en esencia, el refuerzo perfecto para los Knicks: neoyorkino, anhelado por la afición, elogiado por la prensa. Joven. Experimentado. Con una estadística favorable.
La ventana de pases de la NBA es como una novela: se sabe cómo inicia, más, sin embargo, nunca se conoce el final claro. Se da una cesión. Se consigue un acuerdo por un contrato no aprobado. Se ficha a un Draft prometedor que cumple el sueño de firmar con la liga de baloncesto más importante del mundo. O, como en el caso de Mitchell, la novela deja un rechazo de última hora. Un cambio de horizontes. Una decepción enorme para los seguidores que, alimentados por el movimiento periodístico, creyeron, letra a letra, el guión impuesto por los medios estadounidenses.
Altas de los Knicks
Mitchell, que tenía todo acordado para llegar a la Gran Manzana, se inclinó por el novedoso proyecto de Cleveland. La caída de su traspaso no se traduce a una decepción total en los Knicks. La escuadra, en lugar de ahogarse en un mar de lágrimas por la negativa del escolta, movió sus piezas rápido y, por ejemplo, desechó contratos prescindibles y liberó, de esa manera, un elevado porcentaje de masa salarial. Kemba Walker (32), Alec Burks (31) y Nerlens Noel (28) no hacen parte de la plantilla del equipo neoyorquino que, en contraste, reforzó la posición de base con Jalen Brunson y se hizo con los servicios de un pívot como Isaiah Hartenstein.
Brunson firma con los Knicks para transformarse en el eje del Big Three de Tom Thibodeau, en compañía con Randle y Barrett. Brunson, por ahora, sostuvo una conversación con Barret. Sin embargo, aún no ha logrado entablar un contacto con Randle, cuestionado jugador que terminó de mala manera la temporada anterior.
Sesgado por el egoísmo, Randle evidenció inconvenientes con el grupo de los Knicks. Aunque se mencionó en su momento un viable traspaso, el jugador decidió mantener su vínculo con los de la Gran Manzana y, por ahora, seguirá manteniendo su rol de trascendental en la plantilla.
Al igual que en el mercado de pases, el camino de los Knicks en la NBA durante las últimas temporadas ha sido una novela. Pero no. No ha sido una novela romántica, idílica, con historias que marcan el corazón de sus seguidores. Ha sido, en sí, una novela dramática. Un thriller. Una obra de teatro de suspense que, en general, termina mal para uno de sus protagonistas.
El mercado de transferencias ha sido polémico en cuanto a rumores para los Knicks. Sin embargo, en lo que refiere a las bajas, la ventana de pases del verano ha transcurrido con serenidad. De hecho, las salidas del equipo de Nueva York se cuentan con los dedos de la mano.
El objetivo de la temporada
El balance de las estadísticas de los Knicks en la pasada campaña son pobres: (37-45). 11º Conferencia Este, fuera de los playoffs. Luchar por el título será una tarea complicada. No obstante, la palabra que define el objetivo de campaña de los Knicks es, en definitiva, mejorar la imagen e intentar, de alguna forma, la clasificación a los Playoffs.
La predicción de Flashscore
La predicción de Flashscore indica que los New York Knicks son un proceso en construcción. En sí, la expectativa del equipo es intentar clasificar a los playoffs. El rendimiento de la escuadra en los últimos años no ha sido el mejor. Por estos motivos, pronosticar un resultado a un mediano-largo plazo es una tarea complicada, incluso para los seguidores del conjunto.