La estabilidad es, por momentos, una virtud ausente en el mundo de los banquillos. Los entrenadores, casi siempre, deben moverse día a día con las maletas preparadas. Las crisis, las lesiones, los problemas administrativos pueden finalizar un proceso de la noche a la mañana o, en otros casos, potenciar a las directivas a apostar por la continuidad y en el cuidado de una estructura, de una base.
Sudamérica, una región acostumbrada a los cambios de entrenadores constantemente, refleja dos selecciones que, pese al paso del tiempo, se han decantado por defender unos procesos con resultados positivos.
Lionel Scaloni, por ejemplo, es uno de los directores técnicos más respetados de la región. Bicampeón de América y campeón del Mundo, el antiguo jugador del West Ham y del Mallorca, entre otros clubes, logró instalar un sistema que revolucionó el estilo de Argentina. La presión alta. La agresividad y la efectividad son políticas que se reflejan en cada partido que disputa la albiceleste. Scaloni, además, consiguió un hito que sus antecesores no habían alcanzado más allá de los títulos: la selección ya no depende de Messi. Julián Álvarez, Lautaro Martínez, autor del gol que le dio a la albiceleste la Copa América ante Colombia, Nico González, de la Juventus, Thiago Almada y compañía se ubican en el frente ofensivo del equipo y se convierten en amenazas letales para el contrario.
Scaloni, además, aterrizó en el banquillo de la selección argentina como interino y gracias al cambio de dinámica -se venía de un entorno hostíl, con Sampaoli y compañía-, la AFA decidió sacarlo del interinato y convertirlo en seleccionador de forma oficial.
Lorenzo relanza a Colombia
En Barranquilla, ciudad costera que ejerce como sede de la selección Colombia, también han apostado por la continuidad de Néstor Lorenzo, un entrenador que, en su momento, fue criticado por un sector de la prensa y por algunos aficionados que no se sentían conformes con su experiencia. El argentino no había asumido las riendas de ninguna selección -fue asistente en la era Pékerman-.
Con el paso del tiempo, Lorenzo consiguió la clasificación de Colombia para la final de la Copa América luego de más de 20 años de ausencia. El director técnico, asimismo, mantiene a los cafeteros en la segunda plaza de las eliminatorias rumbo a la Copa del Mundo de 2026.
La inestabilidad amenaza a la región
La incertidumbre, desde otra perspectiva, ha empezado a apoderarse de algunos banquillos. En Chile, por ejemplo, se rumorea sobre una posible salida de Ricardo Gareca. El argentino no ha logrado darle a los australes su primera victoria en lo que va de las eliminatorias. Chile, un bicampeón de América que sembró terror durante la década pasada por su estilo de juego agresivo, potente y físico, perdió por 4-0 con Colombia en Barranquilla y mostró una imagen complicada.
Marcelo Bielsa, de igual manera, es fuente de críticas después de unas picantes declaraciones de Luis Suárez. El antiguo jugador del FC Barcelona cuestionó el trato del entrenador con los trabajadores, jugadores e integrantes de la selección de Uruguay. Los charruas igualaron los dos partidos disputados en la fecha FIFA de octubre y el equipo no despega desde que sufrió la eliminación en semis de Copa América con Colombia.