Sinner cede un set, pero remonta ante Jarry en el día de su regreso
Había mucha expectación por el regreso a la pista de Jannik Sinner. De hecho, el número uno del mundo, que acababa de regresar de un periodo de descanso tras su triunfo en Flushing Meadows, volvía a la pista para defender el título que ganó la temporada pasada en Pekín, donde están en juego importantes puntos en la clasificación, aunque controla firmemente la primera posición de la clasificación ATP.
Enfrente del número uno del mundo, el chileno Nicolás Jarry. No es precisamente un rival de primera ronda. Lo que complicó aún más el regreso del campeón italiano a la pista fue la frialdad de las gradas, que estaban vacías a pesar de que el mejor tenista del planeta en estos momentos estaba en la pista.
No por casualidad, tras seis juegos de sustancial equilibrio, fue Jarry quien se adjudicó el primer y único break del primer parcial, ganado por el chileno con un marcador de 6-4, dando la sensación de estar más metido en el partido.
La reacción
Sin embargo, una vez abajo, Jannik decidió que era el momento de pisar por fin el acelerador, consciente de que contra Jarry no podía ir con el piloto automático, y menos en la primera manga.
Y así, tras mantener su primer juego de servicio del segundo set en blanco, llegó su primer break del partido seguido de otro juego ganado al saque. En resumen, al ganar el primer set, el bueno de Nicolas no hizo más que despertar a la bestia. A pesar de sí mismo.
Prueba de ello es que, aunque el chileno intentó reaccionar en el quinto juego, poniéndose 0-30, Sinner tenía ahora la velocidad de crucero del número uno del mundo, cerrando el segundo set, en el segundo punto que tuvo disponible, con el resultado de 6-3 a su favor.
Adiós, Nicolas
Y que las cosas habían cambiado Sinner quiso confirmárselo a su rival en el primer juego del tercero. El italiano se puso inmediatamente 0-40, robándole a Jarry su servicio en el segundo punto de ruptura.
Lo mismo ocurrió en el siguiente juego, que el campeón del Tirol del Sur cerró con extrema facilidad, concediendo un solo punto al chileno que, poco a poco, se fue dando cuenta de que era poco probable que pudiera con su rival.
Y sí, porque una vez puesta la flecha, Jannik no paró más, concediendo lo mínimo a su rival, llegando al final con facilidad y cerrando el partido en menos de dos horas con el resultado de 4-6 6-3 6-1.